Croniquilla express de la primera carrera de este 2024, el 5 k de San Fulgencio, y que espero que sea la primera de un año mucho más fecundo que el 2023. Y es que los 8 meses sin competir, dedicado sólo a caminar y preparar la Matagalls, han pasado factura tanto a nivel de cantidad como de calidad en mi "status atlético", pero bueno, que fueran todos esos los problemas
Echando la vista atrás, resulta que esta carrera a la que yo le tengo tanto aprecio, ya fuera por el trato, por el circuito, por la marca que hice en ella, no la corría desde 2018, y yo pensando que fue haría un par de años... ¡Tempus fugit! Así que este año, aunque tuviera que hacer encaje de bolillos, el último domingo antes de empezar a trabajar me iría para la bonita localidad Vegabajense. Además, existía el acicate de que muchos de mis compañeros/amigos de mi club CorrexCrevillent amén de mis buenos amigos Irene y Donate también acudirían a la cita.
Se levanta un día no muy frío pero ventoso, aunque dado mi estado de forma tras una semana sin hacer absolutamente nada más que dedicarme a la noble labor de padre, mis ambiciones cronométricas no se iban a ver afectadas por la presencia de Eolo. Vamos, que iba sin ambición, así que que soplara viento me daba un poco igual.
Llego ni pronto ni tarde a San Fulgencio, pero al entrar por la carretera de Guardamar me cuesta localizar el parking, y al final acabo aparcando por una obra. Bajo del coche, y si, efectivamente hace frío y viento, pero lo normal a estas fechas. Me voy a la plaza, como siempre muy buen ambiente, y ya puedo saludar a la tropa del club: Ramón el presi, Manchón y Paquito, el bueno de Marcel con el que me debo alguna salida montañera, el crack Sergio el juvenil, mi gran Antonio Becerril, buen amigo y convaleciente de una lesión, y mi buen amigo Candela, que hoy ejercerá de árbitro de Nórdica, por otro lado un crack de esta modalidad. Un rato de charla y para el coche que tampoco voy sobrado.
Rebusco en el maletero algo de manga larga pues contaba con correr en manga corta, y encuentro una camiseta de la MM de Pinoso 2006 que corrí con mi buen amigo Miguel, así que ya estamos vestidos de luces. Casualmente he aparcado al lado de mi presi, amigo y Tocayo Ramón López, así que vuelta y a buscar por la plaza a ver si veo a Irene y Donate. Así pasa el rato, no pudiendo conseguir el saludo y abrazo con mi pareja hasta 2 minutos antes de la salida, y es que a veces las necesidades fisiológicas son difíciles de resolver.
Así que a las 10:00 horas, en medio de un ambiente muy bueno, en cola de pelotón y delante de los marchadores de nórdica, un buen pelotón, a darle a la zapatilla. Tras el primer estrechamiento, noto que las sensaciones no son buenas, y decido por enésima vez desde hace 8 meses no mirar el ritmo en el Garmin. Esta vez no ocurre como habitualmente en los últimos tiempos, y aunque voy adelantando por el llano circuito fulgenciense, no tan fluidamente como en Bigastro o Guardamar. Ay la Navidad...
Para quien no lo conozca, este 5k es superapto para marca, y son dos vueltas llanas alrededor del pueblo, un kilómetro largo alrededor del pueblo y uno por sus callejuelas, aproximadamente. En la primera vuelta me doy cuenta de que no podré poner el viento como excusa, eso si las sensaciones nada buenas. Pero como uno ya se ha visto en varias de esta, pues en vez de lanzarse a por las dos orejas y el rabo, se dedica a guardar y recoger la ropa. Aunque mentalmente , desde mi última carrera en Azkoitia y quizá más, me estoy empezando a cansar de no recuperar a aquel Ramón que si que iba a batir marca en cada carrera, a no tener aquel gusanillo, a esta vez si, mirar el puñetero Garmin. En la senda estoy, me estoy cuidando bastante, entrenando bien , y sé que llegará el momento de volver a disfrutar de ese sadomasoquismo de las series, de apretarse el pulsómetro, de ir controlando los ritmos de carrera,...
Irene en primer plano
Para la colección de caras raras
Paso la primera vuelta y recupero sensaciones, a lo que se añade que la gente que habrá salido fuerte empieza a aminorar y yo puedo seguir adelantando posiciones con más fluidez, ya ves tu la chorrada pero bueno, cada uno se contenta a su manera.
A mitad de segunda vuelta saludo a Paquito que también está de vuelta y localizo a Irene a lo lejos, a la que trato en vano de alcanzar para poder entrar con ella, cosa que hago finalmente en 24'30", a 5'00/km, ritmo que me deja un sabor agridulce, sólo compensado con el saludo a mi pareja de amigos y con las buenas cervezas y cocas con las que la fantástica organización de esta buenísima carrera nos deleitó. Posición final 212, con 24'52" oficiales, posición 212 de 407. Todo ello en https://www.chiplevante.com/es/prueba/2024REYESSANFULGENCIO-1005-2024
Imposible coger a Irene
Ahora toca otra carrera de sobrevivir, la Media de Santa Pola, no sé ni los años que hace que no la corro, pero tengo ilusión por eso mismo. Y mientras, seguiremos tratando de recuperar la forma y de poder volver a mirar el Garmin, eso si, siempre disfrutando de dar zancadas. Nos vemos en un par de semanas
A pesar nuestro los años van pasando y bueno, aun estas tu ahi dejando el liston medianamente bien jeje. Un saludico.
ResponderEliminarYa se agradecen tus palabras viejo rockero ( o rugnero jjj)
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