No eres logras, eres lo que has superado

Es necesario revivir para saborear (Rozalén)

martes, 17 de octubre de 2023

XLIV Matagalls-Montserrat: si no se puede correr...

 






    Más de cinco meses sin escribir en mi querido blog, pero es que las circunstancias han hecho que me haya tirado todo este tiempo sin ponerme un dorsal. Pero claro, antes de todo, aquellos lectores que queden aún con ganas de leer las desventuras de este andarín/corredor se preguntarán: "aquí hay algo que no encaja, no puede correr ¿y reaparece con una ultramaratón de 84 km y 2800m+??". No hay que alarmarse, no he estado encerrado en el CAR de Sierra Nevada entrenando durante casi medio año, jjj, más bien al contrario. Vayamos pues al principio...

    Todo viene provocado por una lesión en el coccix allá por Abril, que me impide correr durante casi dos meses. Harto de la situación, me debato entre hacerme socio de un pub inglés y dedicarme a beber cerveza hasta no poder más o buscar una alternativa deportiva que permita a mi hígado sobrevivir. En esos dimes y diretes me llega un correo, como cada año, de la Matagalls-Montserrat recordando la fecha de apertura de inscripciones. Y en un noche loca, decido que ya va siendo hora de salir de la zona de confort, que es una marcha excursionista prevista para hacer andando , y que tendría un objetivo de los buenos en mentes cara al verano, que me mantendría en la brecha y me impediría abandonarme a los placeres estivales.

    Mas creo que ha llegado el momento de hacer las presentaciones, y explicar qué es la Matagalls-Montserrat. La Matagalls es la marcha excursionista por antonomasia de Cataluña, teniendo su origen en las palabras de Mosseny Jaume Oliveras: "Anar a Montserrat no es pas res difícil. Ara bé, anar des del Montseny en meny de 24 hores es un repte que no sé si el joven d´avui es capacç de fer"



Mosseny Oliveres, el precursor



    Lo bueno y malo de peinar canas en esto del correr (casi 30 años ya) es que uno acumula recuerdos. En mis inicios apenas existía internet, te apuntabas a las carreras en las tiendas del pueblo, para saber calendarios te comprabas la runners,... Eso evolucionó y descubrí los foros, espacios donde compartir y motivar/se, muy lejos en calidad del actual yo-mi-me-conmigo Instagram y demás. Pues en uno de esos foros descubrí esta Marcha, y la puse en mi lista de mitos: ir del Montseny a Montserrat es para un barcelonés como yo una locura que atravesaría casi toda la provincia. Hemos de tener en cuenta que en aquella época lo de la ultra sonaba a locura, apenas se escuchaba del Maratón de Madrid y Barcelona(Valencia era una prueba desangelada que se corría en Febrero) y como ultra sólo sonaba los 100 km de Madrid Corricolari y Ronda, pues la incipiente MIM era considerada por mi una locura.

    Pues además sumemos que el participar en aquellos foros te permitía conocer, aunque fuera virtualmente, a los que se convertirían en héroes de carne y hueso para mi: Escute, los Teres,.... y un tal Paco Robles, gente capaz de enfrentarse a auténticas barbaridades, estaban abriendo el camino a las Ultras, y nombres épicos resonaban cuando leía sus aventuras: Carros de Foc, Porta del Cel, Cavalls del Vent, Nuria Queralt, Matagalls- Montserrat....


Paco Robles, sería muy importante para mi en carrera



    Y bueno lector, no pretendo que esta crónica se convierta en la del abuelo cebolleta, así que vamos al lío. Puestos ya en situación, hablemos de entrenos previos. Durante el mes de Mayo y Junio visité bastante la Sierra de Crevillent, acumulando rutas de unos 20 km y 1000m+. La verdad que uno no sabe como preparar esto, pero algunas crónicas invitaban a pensar en hacer montaña, algunas zapatadas largas y luego tirar de testiculina. Y así hice, tres tiradas largas: Alicante-Balcón de Alicante(42 km,1200m+), Vía Verde de Agost i/v( aquí le vi las orejas al lobo después de acumular una semana en Pirineos y hacerla casi sin comer) y la Marxa del tío Pere entre Elche y el Santuario de la Font- Roja, amén de mis escapadas veraniegas a Pirineos y Sierra Nevada. Hay que tener en cuenta que esto lo acumulaba en las quincenas que no estaba de vacaciones con mis hijos, luego iba a lo bruto. ¿Me sirvieron estos entrenos? Pues mucho, pero sobretodo psicológicamente, al acostumbrarme a la soledad y a la nocturnidad, pues el verano y Alicante no es compatible para entrenar de día. Esos entrenos forjaron un poco el alma del guerrero que iba a necesitar seguro en el mes de Septiembre.


Entreno veraniego Elche-Alcoy




    Y llega el fin de semana. La apatía del viernes me retrotrae a Ronda, donde me pregunté qué narices hago yendo a una prueba tan brutal con tan poco entreno. Estoy seguro de que no pasaré del km 40, son muchos metros de desnivel positivo que no he acumulado en mis tiradas largas. A mi favor, el hecho de saber que andar es algo que no me cansa, y que he decidido mentalmente dedicar esta prueba a Alberto, al cual encantaban las ultras y que me enseñó lo mucho o poco que sé. Al final, por mor de no sentirme un fracasado al no haberlo siquiera intentado, cojo las maletas y enfilo a mi Barcelona natal, concretamente al pueblo de Aiguafreda, a escasos 15 km de la salida en el mítio Coll Formic. Cabe decir que ya no se sale del propio pico de Matagalls por cuestiones del nuevo ecologismo que permite construir autovías pero no pisar el monte.

    Noche tranquila, bocata en el único bar del pueblo abierto, donde la amable camarera me pregunta por mis intenciones, sabedora de la respuesta al ver mi vestimenta. Entonces me da un consejo: "noi, aguanta fins al km 30, es un perfil favorable peró si apretes massa petaràs segur". Tras un par de Gin Tonics, me despido sabedor de que he de hacer caso de las sabias palabras.

    Me levanto lozano y sin prisa, no obstante la prueba sale por oleadas a partir de las 15h30, en mi caso me toca a las 16:45. Doy un paseo por el pueblo, almuerzo, compro pan para el bocadillo y me dirijo a Coll Formic, bonito collado a los pies del Matagalls, rodeado de restos íberos y de un bonito monasterio. Creo que soy de los primeros en recoger el dorsal, y hago tiempo metiendo al body una ensalada de pasta y observando como aquello se anima con la constante llegada de autobuses.


Mítico aparcamiento de Coll Formic







Fotos de la previa



    Me fijo en que la mayor parte de los voluntarios son de una edad que supera los 50, cuánto que agradecer y alguna sombra sobre a dónde vamos con tanto individualismo en esto del monte. Cada vez menos clubes, menos foros, menos crónicas en los blogs, lo único que importa es el autoego.

    Al final, se empiezan a dar las salidas y me acerco hasta un lateral de la recta de salida. Las oleadas van una por minuto, de unos 30 corredores, y me sorprende ver pocos corredores y el ambiente relajado y feliz de los andarines. A su vez, me emociono y por primera vez en el viaje, los ojos se me llenan de lágrimas: estoy en la Matagalls, en uno de mis mitos, y he tenido las narices de , al menos , ponerme en la salida. También tengo un recuerdo hacia Alberto, y empiezo también a ser consciente del aventurón en el que me he metido.

    Antes de salir y , como una señal premonitoria, reconozco a Paco Robles, al cuál me presento y que me ofrece toda su ayuda, demostrando en pocos segundos el por qué de ese reconocimiento entre mis amigos corredores. Me comenta que esta vez no participa, pero estará de equipo de apoyo de gente de su club. Os puedo asegurar que eso en una marxa como esta son palabras mayores.No será la última vez que lo vea. 
   Ha llegado el momento, nombran por megafonía mi grupo de dorsal, me santiguo, me vuelvo a emocionar y me sitúo en línea de salida
El perfil del asunto



    Llegar desde el Montseny hasta el mismísimo Monasterio de Montserrat, 84 km,2800m+, la mayor parte de ellos de noche y sólo.

1º tramo: Coll Formic- Aiguafreda (km0-km10'2)

    Buen ambiente en la grupeta de salida, vamos por una carretera llana ,con algo de calor, y enseguida me quedo el segundo del grupo, y enlazamos con los de la salida previa. Las vistas del valle de Montseny con el Matagalls dominando son impresionantes, y además me doy cuenta de que el ambiente es diferente a cualquier carrera que haya hecho. Esto es excursionismo, mal que nos pasen traileros cada cierto tiempo.

    Sobre el km 5 abandonamos la carretera y ya por pista iniciamos un fuerte descenso de unos 300m - hasta llegar a Aiguafreda, donde está el primer avituallamiento, bien servido y muy amablemente atendido por voluntarios. Es algo menos de las 19 h, llevo una hora sobre el corte, y soy consciente que no me quedan más que un par de horas de luz, así que apenas paro, ya habrá tiempo.





Fotos del primer tramo, en pleno Montseny



2º tramo: Aiguafreda- Coll de Poses (km 10'2-km 26'2)

    Tras salir del pueblo por la calle principal, y entre los ánimos de algunos que ya han empezado la fiesta, continuamos hasta Centelles e iniciamos las hostilidades, con una buena rampa de asfalto, que se convierte en un corriol(sendero) estrechillo entre frondosa vegetación. Salimos a una pista amplia, donde ya se ven los primeros abandonos. A lo lejos en las alturas se ven marchadores, así que el perfil se cumple. Duras subidas nos permiten alcanzar el otro lado del valle, intuyendo a lo lejos Coll Formic y abajo Aiguafreda.

    Una vez coronado, vamos lidiando con una pista en llano, donde me cruzo por primera vez con Paco en dirección contraria. Me avisa de que aún queda una segunda subida más corta, la cuál afronto a buen ritmo.

    Está empezando a atardecer, y en breve me pasa de nuevo Paco con su grupeta al trote. Declino su invitación a unirme, aún siendo en bajada, hoy tengo muy claro que sólo andaré salvo que lo vea muy claro. Las palabras de mi amiga camarera aún resuenan. guarda hasta el km 30, y apenas voy por el km 18.

    Tras coronar el segundo repecho, y a pesar de que la gente es reacia a encender el frontal, yo no apuro y empieza la parte nocturna, que durará unas 10 horas.

    Tras finalizar el descenso, ya con airecillo que hará más agradable el caminar, encaro la dura subida hacia el Coll de Poses, por estrecho sendero y donde veo que mi ritmo es bueno en comparación. Llegada al segundo control, situado en un collado por donde pasa la carretera. Son sobre las 22h, mucho antes de lo que tenía planeado, dos horas de margen, esto parece que marcha






Montseny puro y duro



3º tramo: Coll de Poses- Sant Llorenç Savall (km 26'2-km 40'4)

    Avituallamiento algo caótico. Justo al entrar relleno agua en las fuentes estilo Ronda, para encontrarme largas colas tanto para el sólido como el líquido. Además, hemos de retirarnos un poco pues hay alguna persona que está siendo atendida por Urgencias. Empiezo a escuchar que si no queda de esto o de lo otro, a pesar de los buenos intentos por parte de los magníficos voluntarios, siempre con una sonrisa. Decido salirme , he decidido ir en autónomo, llevo mis sobres de Tang y unos bocadillos de chorizo y atún, tratando un poco de reinvidicar la old school montañera con la que me crié, susituída por zapas de 200 euros , geles y ipods.

    Me encuentro a Paco Robles, toda una alegría, y me alegra al comentarme que me ve muy bien, que he adelantado a sus compañeros pero que ahora viene uno de los tramos más duros. Empieza el tramo clave.

    Abandono el avituallamiento para meterme en una pista que en breve se tornará más estrecha y desvelará sus intenciones par los próximos kilómetros: el desnivel es importante a pesar de ser buen camino, hay que apretar pero el bocata de chorizo me ha sentado de 10, y veo como poco a poco voy pasando gente. Los controles de paso alegran el ánimo cuando los ves, no así cuando lees en la cartelería que Montserrat está a 50 km aún.

    Coronamos tras unos 7 km, llegamos a un cruce donde hay un llaneo breve que nos permite vislumbrar a lo lejos unas luces que se supone el crux de la historia, el maratón, el meridiano, el lugar donde se producen la mayoría de abandonos, el avituallamiento de Sant Llorenç Savall.. Allá por el 34-35 empieza una bajada importante por pista y por tramos cementados alternados, y por primera vez miro atrás y veo una inmensa fila de luces al más puro estilo Transvulcania. Por segunda vez, me emociono y me salen las lágrimas, no sé muy bien el por qué, quizá no haga falta saberlo.

    Me pongo por primera vez los auriculares, y es que a diferencia de otras carreras de montaña, y desconozco si es por la forma de ser catalana (ojo, que yo lo soy) aquí uno no debe esperar el "siempre irás acompañado y de charla". Aquí la gente o bien va en equipo, o va sola y no tiende a relacionarse. Así que Spotify y a zapatear hasta llegar a Sant Llorenç, el cual atravesamos de punta a punta para llegar al, ahora si, bien surtido avituallamiento. Estoy en buenas condiciones, reposto caldo y alguna chuche, son las 2 a.m más o menos, 3 horas sobre el corte


Sant Llorenç Savall, el ecuador de la Marcha



4ºtramo: Sant Llorenç Savall - Matadepera (km 40'4-km 58'1)

    Salgo del avituallamiento por las últimas calles del pueblo por unas costeras suaves y de nuevo a la noche. Entramos en el Parque Natural de Sant Llorenç de Munt i l' Obaga.Al principio es un tramo de transición por pequeñas costeras , alguna que otra rambla donde se llegó a hacer difícil seguir el camino , pues cabe decir que la Matagalls no está balizada, hay que seguir las señales rojas y verdes estilo GR. lo que si ilusiona es ver los carteles que nos indican que ya hemos superado la mitad, sólo queda restar.

    Llegando al km 50 se empiezan a ver unas luces de pueblo al fondo, pregunto a unas curtidas, amables y bellas marchadoras que me indican que si, que es Matadepera, pero que nos queda una cuesta muy muy dura previa .

    Pensando que tampoco ha de ser para tanto, en una revuelta nos internamos en un bosque por una cuesta de las que quitan el hipo, y estoy hablando de un 20%, es la subida del Torrent de les Saleres. Os puedo asegurar que a veces costaba dar más de tres pasos seguidos, son 5 km "inolvidables", sobretodo por no ver el final. Aquí los vigilados ritmos hasta ahora se van a hacer puñetas. pero bueno, como todo en la vida, se acaba al final, y tras otro breve repecho, ahora si coronamos y podemos intuir al fondo, entre la oscuridad Montserrat. Se eriza la piel, sólo quedan 30 km, creo que es hora de empezar a creérmelo.

    Bajada por pendientes asfaltadas y de tierra a partes iguales hasta entrar en la exclusiva población de Matadepera, con sus impresionantes casoplones, y que atravesamos hasta casi salir de ella y llegar al avituallamiento de la Riera de les Arenes sobre las 4 am, 5 horas sobre el corte. Es el famoso control de los Donuts, he superado el tramo más largo , cargo café, donuts, muerdo algo de un sandwich que llevo y salgo sin casi parar. He de decir que el tiempo fue magnífico, si te parabas mucho te quedabas helado pero al ponerte a caminar enseguida manga corta





Parque de Sant Llorenç de Munt, hay que volver de día



5º tramo: Matadepera - Vacarisses (km 58'1-km 72'3)

    Salgo de la Riera con buenas sensaciones y a sabiendas que esto se va acabando, si consigo hacer este tramo sin contratiempos físicos nada me impedirá ver a la Moreneta. Pero ah amigo, aún quedaba una.

    Tras superar unas cuestas a las afueras de Matadepera, cogemos camino cementado con una muy dura pendiente,es el último repechón previa a la mítica Draçera dels Tres Quarts, la subida a Montserrat, de la cual hablaré dentro de poco.

    Aquí por primera vez me uno a un colega muy majo de Barcelona, con no sé cuántas Matagalls. Me describe la subida al Obac en la que estamos, núcleo de Sant Llorenç de Munt, y también me cuenta sobre la historia de la MM, de como ha ido perdiendo carácter montañero en favor de ser algo más comercial y ganar participantes, supongo que es ley de vida, o más bien de esta vida.

    El ritmo que llevamos ha hecho que se queden sus compañeros, y al finalizar la cuesta se queda a esperarlos. Y si, por fin, un poco más adelante, al coronar, empieza a clarear y ahora si se intuye claramente el mágico perfil de Montserrat. Me emociono de nuevo, y me digo que siendo el km 62, sólo me queda una Media, uno de mis clásicos entrenos de entre semana.

    Bajamos hacia una población reagrupados, pasamos una especie de aljibe y me cruzo con Paco Robles de nuevo. Me dice que va a buscar a un compi, y que está ayudando a otro que anda jodido. Yo sigo enfilado en la bajada entre por un pueblín cuyo nombre no recuerdo, cuando de repente se apaga la luz, y es que entramos en una espesísima niebla que a ratos apenas deja ver más de un par de metros.

    Salimos de las casas para entrar en un barranco precioso, donde al aflojar la niebla los rayos de sol entran causando un efecto mágico, entre la verdor del bosque, ahora ya plenamente visible, y es que dan muchísimas ganas de volver a hacer el recorrido de día, ha de ser precioso.

    Para salir del barranco un grupo de colegas monta un tapón de cierta mala educación, pero a estas alturas sólo queda esperar, saltar en cuanto se puede y enfilar medio corriendo la bajada a Vacarisses. Se hace la hora de los humanos, y me llegan mensajes de ánimo de Jordi y Rafa que se van a entrenar, que animan como Dios.

    Llegada al último avituallamiento, me encuentro a Paco sentado esperando, lo de este hombre no tiene nombre. Me dice que me ve muy bien, le cuento la historia de Alberto que apenas puedo acabar pues la congoja y el evitar que me vea llorar lo impide. Entro, pillo cuatro cosas y sin parar salgo hacia Montserrat. Sólo quedan 12 km



Se empieza a ver ya muy cerca



6º tramo: Vacarisses - Monistrol (km 72'3-km 80)

    Salgo cuesta abajo para tras las dos primeras curvas, y ahora si, ver deslumbrante ante mi, con todo su poderío, Montserrat. Y ahora si, no me puedo contener y me aparto a llorar. No sé que me está pasando esta carrera, pero por Dios que es la más emocional que he vivido.

    Unos segundos y me hago al ánimo, me uno a una chica que va más o menos a mi ritmo y atravesamos la llanura hasta Monistrol, atravesando casas de campo, chalets mientras cruzo mensajes con mi familia, que ha estado todo la noche ahí. Pasamos por debajo de carreteras, nuevas cuestas y voluntarios animando, vamos llegando a Monistrol, el pueblo previo a la subida, la Draçera dels tres Quarts, una de las más famosas y míticas subidas a Montserrat. En números, 4'5 km y 650m+, llevando 80 km en eel cuerpo. ¿Podré o me arrastraré?

    Cruzo el puente sobre el río Llobregat, me uno a una muy buena compañía, y no queda otra , a subir.



Cerca de Monistrol


Tras este puente empezaba la Drecera dels Tres Quarts



7º tramo: Monistrol de Montserrat- Abadía de Montserrat (km 80-km 84'3)

    Las primeras calles son bastante empinadas, pero en breve abandonamos para coger el sendero. Es un sendero en zig-zag que va ganando altura rápidamente, no demasiado técnico pero que no cesa. Superado el primer tramos, flanquea por toda la cara Norte en ascenso, para llegar a unos escalones que nos dejan en el último tramo cementado que sube a la estación del funi.

    ¿Y cómo me fue? Pues inexplicablemente, fui como una moto, no sé si algo o alguien me empujo, pero en mi vida hubiera pensado sentirme con esa fuerza.







Imágenes de la Drecera dels Tres Quarts




    Y claro, se suben las escaleras de la estación, se llega a la entrada del complejo y sólo queda subir los míticos escalones. No quiero parar, acelero y de hecho subo corriendo hasta la explanada. No puedo ni quiero explicar lo que sentí al ver el Monasterio delante de mi, creía estar en una nube. De hecho, me costó localizar la llegada desprovista de arco, situados en un lateral. Cruzo, medalla, y no, ya no me quedan lágrimas, sólo orgullo y agradecimiento.



Orgullo y agradecimiento


Final: Empiezo por esto último, gracias a todos los que habéis confiado en mi, compartido entrenamientos, unos poco y otros mucho por circunstancias de la vida, pero cada mensaje de ánimo, cada paso juntos, cada pregunta de cómo estás, cómo vas, durante los duros entrenos de Agosto, o la confianza. No nombro, pero sabéis quién sois. Y gracias a los que no están, a los que desde el cielo me cuidan y me ayudan a poder hacer estas locuras y demostrarme quien soy y que puedo hacer.

    Y orgullo, orgullo por esto último, porque pude dedicarle a un amigo que debería seguir aquí una carrera digna de él, cuando en Abril estaba lesionado y no daba ni yo mismo un duro por mi, desde lo más bajo pude remontar. Y ver que aún queda algo del deportista que fui, y que aunque las circunstancias no sean las ideales, el guerrero aún habita.

    Y tras esta morterada emocional, contar el final final. Pues como decía desde el principio, no esperéis ninguna fiesta especial. Medalla, fruta, agua y fin. El espacio se comparte con los turistas, así que entré en la Abadía a ver a la Virgen, pero al estar en misa tampoco quise forzar y me fui rápido. Y como no podía ser de otra manera, me fui directo a un bar, al único, y tras dos botes de cerveza bien merecidos, enfilé el funi y para Alicante, que quedaban unas horas.












    Mil gracias si has leído sólo un trozo, o todo, pero esta crónica ha sido una forma de expiación de aquellas 17 horas








P.D: No hay ninguna foto de la organización, como os dije, Matagalls es "old school".



sábado, 1 de abril de 2023

XXX Media Maratón Azkoitia Azpeitia: correr en el País Vasco es diferente



    Vamos a intentar hacer la crónica de una de las mejores carreras que he podido vivir en los últimos tiempos. Y es que la Media Maratón Azkoitia Azpeitia, al menos en mi modesta opinión, tendría un lugar entre el top 5 de carreras asfalteras en España.  El circuito, el ambiente, la dedicación, el cuidado, pero sobretodo, la entrega del público y la historia que está detrás de esta carrera, hacen que sea muy especial.

  Antes de pasar a la crónica en si, no puedo dejar de recomendaros que veais el reportaje sobre Diego García,aquel maratoniano de cinta al pelo que se nos quedó grabado junto con Martin Fiz y Alberto Juzdado de rodillas sobre el tartán de Helsinki. Reconozco que no sabía mucho sobre su figura, pero tras ver el programa, hay que decir que emociona poder correr por sus lugares de entreno habitual. Os dejo el link <iframe src="https://www.facebook.com/plugins/post.php?href=https%3A%2F%2Fwww.facebook.com%2FAZKOITIAZPEITIA%2Fposts%2Fpfbid037cnBmRA9P4jdXvmCYzx5AszYzMog1Xhxvbbyr42YPvz77wXe5enASDdVUtcEGupRl&show_text=true&width=500" width="500" height="494" style="border:none;overflow:hidden" scrolling="no" frameborder="0" allowfullscreen="true" allow="autoplay; clipboard-write; encrypted-media; picture-in-picture; web-share"></iframe>

    Pero más allá de esta intrahistoria tan emotiva ¿por qué reza el título de este post que correr ene esta zona es diferente? Obviamente está el paisaje, con ese verde tan diferencial, pero más lo es si cabe la actitud de la gente hacia el correr. La amabilidad de todas las personas que conocí fue increíble, pero lo verdaderamente impresionante fue la actitud del público. El 90% de las personas que estaban entre el mucho público que estaban en las dos poblaciones no se contentaron con observar, sino que daban ánimos sin parar a todos, no sólo a los primeros. Gente que iba con los amigos, con la familia,  un padre con sus hijas, gente mayor, hasta los usuarios de la residencia de ancianos, personas solas en medio de un polígono que durante las dos vueltas que dimos por Azkoitia no pararon de aplaudir. Al mismo tiempo, los voluntarios de 10, yo creo que no sé cómo explicarlo, es más, creo que no se puede, si lo quieres saber lo único que puedes hacer es venir y vivirlo. 

Estatua homenaje a Diego García


¿Y cómo acabé yo aquí? Pues firme defensor de que cualquier época pasada fue mejor, dos fueron los motivos. Uno, el espíritu viajero corredor del que me impregnó mi querido Alberto, y el otro fueron esos casi desfasados ya blogs, concretamente el de Juan Luis Blanco de Madrid, totalmente recomendable, https://yonhey.blogspot.com/, y gracias al cuál descubrí esta carrera.

Azkoitia
Azpeitia


     Pero tras esta morterada, voy ya con la crónica. Viaje largo que fraccionamos con parada en Tudela, y que como saben los que han viajado hasta estos lares viniendo desde el Mediterráneo, cambian nuestros ojos una vez llegas a Pamplona. El tramo final del viaje, desde Zumárraga hasta Azkoitia, atraviesa un desfiladero de los que te dejan la impresión de que estás entrando en otro planeta, tan verde y tan bonito. Aparcamiento fácil, y lo primero a por el dorsal, donde me llevé mi primera sorpresa.  Y es que no esperemos una Behobia 2, es una carrera mucho más local, donde el cariño y dedicación de los voluntarios se nota desde el principio. Así que ágil recogida de dorsal, un Bitter Kas y dirección Monasterio de Loyola, otra de las maravillas que nos esperan si visitamos la zona, localizado este en Azpeitia. 

Recorrido


     Y aquí otra sorpresa. Y es que yo en un principio, dado el nombre de la prueba, que ambas localidades estarían distanciadas por los 21 km característicos. Pero no, no están a más de 2 km, los otros km saldrían de otra forma, ya descubriría cuál. Bueno, a lo que íbamos, tras visitar el impresionante Monasterio, un poco de ensalada de pasta y a vestirse de luces. La organización proporciona autobuses para dirigirse a la salida, pero al preguntar a un corredor local, me indica que lo mejor es dejar el coche aparcado en el Monasterio, apenas a 2 km de la salida , e ir hasta allí calentando. Como mi estado de forma está entre malo y nulo, decido hacer caso pero subir por la vía Verde que une ambas poblaciones, y por la que discurren los km centrales de la carrera. 

Calentando en la Vía Verde


  Así que llegada pronta a Azkoitia de nuevo, pero ya se empieza a respirar ambiente en la zona de salida. Para no perder temperatura, que es bastante agradable, la organización ofrece café gratis, cosa que aprovechó sentado en uno de los soportales aledaños. Es curioso ver todo camisetas de clubes desconocidos, e incluso puedo saludar a José María del 42195.es,, al cuál seguía por Facebook, un tío muy majo . También soy testigo de la llegada de la élite africana en el mismo bus que otros corredores, y es que ya digo, esta carrera es diferente. 

Ready?


    El tiempo pasa rápido entre los bertsolaris, la música y la salida del 8k, y llega el momento, puntual a las 16:30, bajo unas nubes que impiden a Lorenzo castigar como querría. Salgo, obviamente, en cola de pelotón, sin mirar el reloj, en estos primeros compases que atraviesan calles de Azkoitia, incluyendo el pavés de la zona antigua. Aquí ya me doy cuenta de que esto va a ser diferente, cuando al pasar por estas calles los ánimos de la gente que está degustando sus cafés y bebidas espirituosas retumban , haciéndote casi sonrojar y emocionarte, desde ese momento pongo el modo disfrutar y paro de dar las gracias a la gente. De hecho, mientras tecleo estas palabras tengo la piel de gallina de sólo recordar esos momentos.

    Al salir del pueblo dirección Sur hacemos un ida y vuelta con el único repecho apreciable de todo el recorrido. Y es que no lo habré dicho, pero podéis añadir circuito 100% para marca, pues tuve la sensación de que el casi todo el rato fui en llano o bajando , suma y sigue a favor de esta carrera. Vuelvo, que me dejo llevar. Atravesamos el pueblo por la zona centro y allá por el km 4 atravesamos un polígono, y es que si Euskadi es una comunidad de alto nivel de vida no es porque les regalen el dinero, hay industria, ergo hay polígonos.

La cara no era el espejo del alma


     Primer paso por zona de meta, mejor dicho cerca de ella, y nuevo polígono a cruzar. Este segundo tramo si es un poco más feéte, pero apenas son 100m. Después, zona urbana y enlazamos con la zona antigua de nuevo, y vuelven los ánimos, desde los balcones, las ventanas , los paseantes, todoooos, es brutal.

    Al acabar la segunda vuelta, km 9 más o menos, mis sensaciones han ido a mejor, he pasado los globos de 2h,1h55 , enfilando la preciosa vía verde con ánimo y disfrutando de unos paisajes de escándalo. Tras este tramo, llegan dos momentos especiales para mi. Uno, al acabar la Vía Verde nos están esperando en un lateral, en sus sillas de ruedas, unos 15-20 abuelicos con sus enfermeras aplaudiendo, y uno que es sensible con estos temas ve asomar una lagrimilla por sus ojos. El segundo, es el paso por el perímetro del Monasterio de Loyola, estoy sin palabras del cúmulo de emociones que me estoy llevando. Y es que en el fondo me estoy alegrando de haber venido sin pretensiones cronométricas, pues estoy disfrutando simplemente. 


Disfrutando de la Vía Verde


     En el km 12 abandonamos las calles de Azpeitia y volvemos a coger Vía Verde, que por si no lo he dicho está asfaltada. Rodeamos la bella localidad guipuzcoana , saliendo de la misma: Aquí llevaremos unos 14-15 km, y desde el 9 tengo la sensación de que en bajada. Mis músculos empiezan a recordar mi escaso kilometraje previo, reduzco marcha, y seguimos ganando kilómetros cuesta abajo dirección Donosti.

Con el Monasterio detrás


    Me empiezo a preocupar acerca de en que puñetero momento daremos la vuelta, pero llega en breve, cruzamos puente y a la Nacional. Los repechos que espero no llegan , sólo uno muy breve a la entrada del pueblo. Enganchamos calles céntricas llenas de bares y de nuevo el espectáculo previo: ánimos que hacen retumbar y sonrojar de emoción a un corredor paquete como yo. En este momento me sorprende ver corredores que vienen de cara, y a los que nos unimos para marchar por calles paralelas. Será sobre el km 17, y al poco entiendo, cuando los veo desviarse a meta, mientras nosotros marchamos de nuevo dirección Monasterio. Es aquí donde damos media vuelta y enfilamos ¿meta? No, el punto de "crueldad" aparece, pues es contrameta, para nosotros el km 19 mientras el km 21 para los que van con la sonrisa final a escasos 20 metros a nuestra derecha.

Esta si es espejo del alma


    Pero claro, los ánimos y la música están a punto de alcanzar su cénit, todo el mundo sabe que ya estamos, y sólo queda un trámite de 2 km, para enfilar ahora si , la recta de meta. Creo que es de las pocas veces , si no la única, que no he querido que se acabe una carrera, y eso que muscularmente iba "cascao".  Pero bueno, todo llega, y testimonio fiel tenéis en https://www.youtube.com/watch?v=brQaWQh-Lbs&list=PLL921iqU-U01WRl43S-7BvbOHDR0aJoqZ&index=46, llegando en 1h43'52", 1h44'25", oficial, posición 405 de 586 llegados, todo ello en https://www.rockthesport.com/es/evento/media_azkoitiazpeitia_2023/clasificaciones  ¿os he dicho que los vídeos y las fotos son gratuitas?)


C'est finni


  Con la medalla en la boca, fotillo de una paisana, avituallamiento para este mundo y el otro , y única nota negativa: la cerveza era...... Randler, noooooooo. No haría falta ni mencionar que este asunto fue subsanado rápidamente en un bar cercano, con unos zuritos, y aún mejor más tarde con un buen menú de sidrería. Ah, es que la carrera al ser sábado deja todo el domingo para hacer el retorno, otro punto a favor para este carrerón.



 No puedo acabar sin, a riesgo de ser reiterativo, recomendaros mil por mil esta carrera, y desde luego felicitar a la organización y a toda la gente de ambos pueblos. ¡Volveré si Dios quiere!




domingo, 5 de marzo de 2023

VI Cross Oratorio Festivo: la cosa parece que empieza a carburar

   


Este domingo pasado tuve la suerte de poder volver a correr por las calles de mi querida Orihuela, y es que esta ciudad no me reporta más que buenos recuerdos y sensaciones, habiendo obtenida en ella algunas de mis mejores marcas. Esta vez tocaba una nueva distancia y carrera, el Cross del colegio Diocesano Oratorio Festivo, capitaneado por Paco Pérez de Rafal, tan buen corredor como compañero y persona, y además garantía de buena organización y trato, pues también organiza con su club el magnífico 10K de su pueblo. Además, también ayudaba Sergio Mula, compañero de club y excelente persona.

   Llegaba a la cita con dos semanas encadenadas de buenos entrenamientos, y además había que sumar la buena compañía de mis CorrexCrevillent que iban a participar tanto en el 5k( don César) como Marcha Nórdica (Cristina, Manchón y los Antonios) , quedando David Molina, Óscar y yo para el 10.000. Y además, animando estaría nuestra querida Laura y el gran Paquito. Lo digo y lo repito, es un club formada por una gente de 10, y para mi siempre será lo mejor el poder juntarme y compartir con ellos.

Equipazo (faltan dos)


   Arribo pronto a la patria de Miguel Hernández, aparcamiento sencillo en el centro comercial y a por el dorsal con un frío que quitaba el hipo. Y es que entre el que llevaba metido en el cuerpo tras haber estado en la playa del Altet como voluntario en la Transilicitana, más los apenas 3º que hacían a las 9 am, no animaba a salir del coche en busca del dorsal. Aún así, hacía solecillo y no demasiado aire, buenas condiciones para eso del deporte. Recogida ágil de dorsal, saludos varios y vuelta al coche a engalanarse.

  Así que a las 10 am nos situamos en el arco de salida, que no llegada, pues esta situada en el propio colegio, que se sitúa tras una sospechosa cuesta que sale en perpendicular a la dirección de la salida, y que forma parte de la subida al Seminario. por fin, y tras la salida de los Nórdicos,  toca darle a la zapatilla. El primer km coincide con el tramo del raval de la Media, y toca esquivar en la medida de lo posible el adoquinado que luce la medieval Orihuela. las sensaciones son medio buenas, pero algún músculo está tardando en calentar. A diferencia de la hermana menor de Filípides, en lugar de dar la media vuelta a la altura de la iglesia, en este cross seguimos rectos par casi abandonar la ciudad, momento en el que si damos media vuelta para aprovechar una bajada que permite apretar, o soltar , eso ya depende de cada uno.

Buscando hueco


  Hasta ahora he ido recuperando alguna posición, pero no conviene calentarse, pues hay gente del 5000 y ya sabe uno que luego se puede quedar uno con cara de tonto en la segunda vuelta. Hace un día espectacular para correr, las vistas de la Sierra me dejan absorto mientras entramos de nuevo en la ciudad. Volvemos a empalmar con el circuito de la Media hasta el km 3, momento en el cual aparecemos por el puente, único repecho de la carrera, y donde disfruto de los ánimos de Paquito y Laura. Un ida y vuelta nos dejan el km 4, consistiendo el último de la primera vuelta en un ir y venir por calles empedradas y paralelas que nos dejan en el primer paso por meta.

Acercándonos al puente

Queriendo coger ritmo

y evitando el pavés


  Como era previsible, la merma de corredores es importante en la segunda vuelta, tocando correr bastantes tramos poco acompañado. Del km 5 al 6 asisto a la batalla de tres féminas por la primera plaza,(me guardo mi opinión sobre liebres, etc..) pero al final consigo darle un plus al ritmo y decido que toca mirar el reloj. Calculo tiempos y me doy cuenta de que hoy puede ser un buen día, cronométricamente hablando. El resto de la carrera ya no hay adelantamientos, pero si apretar dientes y disfrutar del magnífico circuito y de los ánimos de los voluntarios, que están con la sonrisa y el ánimo a pesar de la baja temperatura, que no es lo mismo estar parado que corriendo. Un 10 para ellos, el primero del día.

   Cuando ya enfilo la recta de meta, recuerdo que me queda el repecho final, y me surge la duda, pues sabiendo que voy a bajar de 45', es hasta posible que lo haga de 44, así que ..... sorpresa, y si , es duro de narices, pero también es corto, no llegará a los 150 m. Fin de fiesta con 43'54" reales, 44'07" oficial, posición 39 de 201 llegados. Todo ello en http://www.alcanzatumeta.es/resultados-express.php?e=723626&p=724571 






En el repecho final

Buen crono


Muy muy contento al ver que a poco que consigo ligar dos semanas de constancia vuelvo a la buena senda. Saludo a todos mis compañeros, todos muy contentos por sus actuaciones, con especial felicitación a César y David por sus pódiums.

    El resto de la mañana fue disfrutar del magnífico avituallamiento que montó la organización en las instalaciones que puso a nuestra disposición el colegio, donde no faltó de nada. Y es que mi segundo 10 es para la organización, enhorabuena por el pedazo de carrera que tenéis y lo bien que lo habéis hecho. Muy recomendable este Cross, nos vemos si Dios quiere el año que viene